A TODOS LOS LECTORES Y EN ESPECIAL A LOS AMIGOS DEL FERROCARRIL DE CANTABRIA
Cuando el ejercito era de reemplazo, la autoridad militar dictaminaba, con independencia de la realidad, muchas veces, cuando comenzaba el verano, el invierno y demás a efectos de la vestimenta. Ello ocasionaba que en zonas frías fuera ya verano (militarmente) y te pelabas de frío, o por el contrario en zonas cálidas (Alicante) fuera invierno y la tropa tuviera que ir abrigada como si estuviera en Siberia.
Otro tanto ocurría en las antiguas zonas de Renfe, donde de acuerdo con unas directrices, se dictaminaba cuando comenzaba la temporada invernal y se preparaban las locomotoras y los medios de lucha contra la nieve.
Entre estos cabe destacar, los medios humanos, las empalizadas fabricadas con traviesas sobrantes* o más modernamente con obras de mampostería que se colocaban en aquellas zonas en la que se sabía que por causas naturales la nieve tendía a acumularse. En la rampa de Pajares llegaron incluso, a construirse túneles artificiales para evitarla. Estas defensas aún hoy, si somos observadores las podemos ver a lo largo de los trayectos ferroviarios aunque la mayoría en un estado lamentable de conservación.
NOTA HISTORICA: “El medio más eficaz para impedir que se obstruya la vía, consiste en la ejecución de una banqueta de 2’5 a 4 metros que hace frente a los vientos reinantes, y además la construcción de caballeros(1) de 1’20 a 1’5 metros de altura situados a una cierta distancia de la arista del talud opuesto. Estas disposiciones tan sencillas son suficientes para obligar a la nieve a depositarse sobre las banquetas. El ensanche del desmonte presenta además la ventaja de facilitar el paso del aparato destinado a dejar la vía libre, el cual sin esta precaución comprimiría de tal modo la masa de nieve que su paso sería muy difícil y aún imposible para alturas de nieves menores de 1 metro. En los puntos en que no existen caballeros ni banquetas, y las nevadas van acompañadas de vientos fuertes, se emplean cercados de tablas de 1’5 a 2 metros de altura colocados a 7 o 10 metros de la arista del talud.” R.O.P. Tomo I, 1854
(1) Caballeros: Depósitos de tierra sobrantes colocados al lado y en lo alto de un desmonte RAE
Otro medio utilizado de forma masiva fue el factor humano, imprescindible en una época de gran carestía, el cual tenía que hacer frente no solo a la dureza del trabajo, sino también al frío reinante en unas condiciones de abrigo muy diferentes a las actuales. Una prueba documental la podemos ver en un corto publicitario de Renfe, Nieve en Pajares, donde se puede observar lo aquí expuesto.
El siguiente medio es el mecánico, el cual estaba formado por las cuñas quitanieves que obligatoriamente tenían que montar a partir de determinada fecha todas las locomotoras que hacían determinados trayectos. Estas cuñas eran de diversas formas y tamaños, siendo más bajitas en las locomotoras de vapor, y de mayor altura para las eléctricas y diesel.
Pero muchas veces esto, cuando el nivel de nieve era muy alto, no era suficiente y se tenía que recurrir a medios de mayor potencia. El vagón quitanieves denominado Zeppelín y en los años 1960 a quitanieves de funcionamiento mecánico que eliminaban el factor humano y que mejoraron grandemente el servicio. Se puede ver a este respecto el corto de Nevada en Barcelona o similar, donde se muestra el funcionamiento de una de estas locomotoras quitanieves.
Todo esto tenía una finalidad, el mantener el servicio, que como las arterias del cuerpo humano trasladaban las mercancías y viajeros a lo largo de toda la Red. Actualmente todo esto ha desaparecido y el ministro/a de turno (sea del color que sea) no se ruboriza de salir ante los medios de comunicación y decir que los elementos impiden la circulación. Pero no nos dice que en la actualidad no tenemos ni una sola locomotora quitanieves en servicio. Bueno estaría él para dirigir una red en el centro de Europa o más arriba
LOS QN-601 y 602 ex Norte QNf 1 y 2
Esta fue la numeración que recibieron en Renfe los dos vagones que procedentes de la Cía, del Norte se integraron en la empresa nacional para el cometido de la limpieza de la nieve en la vía. Parece ser que no demostraron ser de muy gran utilidad, y el empleo de dos locomotoras unidas por sus ténderes y dotadas de cuñas fueron más eficaces que los pretendidos vagones quitanieves. Fueron construidos por la industria nacional a resultas de un contrato de Norte a mitad de los años 20 del pasado siglo
Esta imagen recoge a uno de estos vehículos tan especiales y a la vez desconocidos (foto archivo ACAF)
El diseño de los mismos obedece a una concepción, pienso que antigua, si bien en los ferrocarriles americanos aún se usan vagones de este tipo con buen resultado (foto de mandíbulas). Estaban vacíos en su interior, teniendo una puerta posterior que permitía su acceso. Igualmente tenía una escotilla en su parte superior, para la posible evacuación del personal que se encontrara en su interior.
Desarrollaron su vida activa en las líneas de Asturias y Santander, en especial en los puertos de Pajares y del Pozazal. En cuanto al sobrenombre de Zeppelines, posiblemente les vino dado por su forma, y haber sido en la época en que entraron en servicio, la de la puesta en servicio de estos dirigibles.
En la actualidad se conserva uno de ellos en la estación cántabra de Bárcena, siendo ejemplar único de la vía ancha española. Por su parte la empresa FEVE conserva uno de vía métrica procedente del ferrocarril de la Robla –tuvo 9 unidades- en sus talleres de Valmaseda.
Algunas imágenes de Quitanieves del mismo estilo constructivo
En estas imágenes podemos ver como en la actualidad aún ingenios como nuestros “zeppelin” están en uso en otras administraciones ferroviarias
El aqui fotografiado responde al nombre de “Mandíbulas”
Finalmente una imagen en servicio de uno de estos quitanieves
LAS BARRERAS DE TRAVIESAS
Desde el punto de vista modelistico podemos dotar, tanto a nuestra maqueta como a nuestro modelos de estos adminículos que vendrán en conferirle aún más realismo y credibilidad al incorporar elementos reales a la misma.
Estas imágenes que se muestran a continuación corresponden a la maqueta de mi amigo Toni que ha tenido la idea de su realización, dado que en la línea del C.A. existían para la lucha contra la nieve.
Aqui vemos como el Sierra Menera a la izquierda de la foto cruza por medio de un túnel con el C.A.
La incorporación de unas sencillas barreras de traviesas o de mampostería no tiene dificultad alguna para su realización. Si nos decidimos por las de obra o mampostería, partiendo de unas láminas de cartón pluma de unos 3 mm o menos, y utilizando viejos carriles debidamente pintados y fijados al suelo tendremos de una forma rápida y económica resuelto el problema. Si somos hiper realistas podemos forrar estas pequeñas porciones de “mampostería artificial” de papel de lija de grano 300 al agua y de esta forma obtener la sensación rugosa del material.
Si por el contrario optamos por la primera opción, tendremos que confeccionar en primer lugar las traviesas partiendo de pequeños palitos de madera con el tamaño de las mismas. Después deberemos imitar la zona donde apoyaba el carril (cajeado), representar los agujeros de los tirafondos, pintar debidamente y envejecer con tierras de decoración. La colocación previa de los carriles, su pintado y posterior patinado nos permitirán el poder confeccionar algunos de estos elementos tan peculiares de nuestro ferrocarril.
Construidas en madera se han envejecido y patinado de forma real
DOS CUÑAS QUITANIEVES
La colocación de uno de estos elementos puede cambiar totalmente la fisonomía de la locomotora a la que dotemos de él. Hasta la aparición de la locomotora eléctrica 7115 de Ibertrén, la presencia de estos elementos a nivel modelístico comercial había sido prácticamente nulo. Aquí cabe destacar la realización efectuada por un artesano Joan Cots (Cavall de Ferro) que hizo en su día dos modelos de estas cuñas que se comercializaron a través de Mabar.
Las imágenes siguientes muestran la presencia o colocación de una de estas cuñas en una locomotora eléctrica 276 que ha terminado su vida activa en esta actividad.
Otro ejemplo es la cuña que se muestra en diferentes fotos y grado de realización que se ha confeccionado a partir documentos reales y que una vez pintada y adaptada a la Mikado de turno, nos permite tener prácticamente un modelo nuevo.
Cuñas reales abandonadas en Canfranc (Toni Murciano)
Su realización no es compleja, básicamente es un desarrollo, pero si que resulta laboriosa de ejecutar dada la gran cantidad de piezas que intervienen en él y el tamaño de las mismas.
Su colocación a falta de pintura
Un grupo de cuñas espera ser montadas en breve
EL ZEPPELÍN
Realmente es este un artilugio feo como él mismo. Obedece a un concepto antiguo y del que existen abundantes fotos de las que se deduce que prácticamente todos los constructores se copiaron unos a otros incorporando ligeras variaciones.
Este modelo nació como resultado de haber obtenido un esquema con sus medidas y ver que su realización no era especialmente difícil. Pues en el fondo no son si no una serie de planchas (latón en mi caso) dobladas según determinadas formas. Una vez realizadas las citadas piezas y ensambladas no quedo sino el dotar a este curioso artilugio de una base móvil confeccionada con restos de un vagón.
Se ha pintado de color gris dado que las fotos en color del único elemento real existente en la actualidad, muestran sobre la base roja de imprimación, la presencia de este color. Igualmente se le han dado unos ligeros toques de pátina, en aquellos lugares en lo que se le supone un mayor desgaste, por ver de acentuar la sensación de vehículo cuya utilidad y funcionamiento es temporal.
EL NEGRITO, Y LA CALEFACCIÓN DE LOS TRENES
Dado que estamos tratando el tema de la nieve en nuestras maquetas, lo que lleva inequívocamente aparejado el frío, creo que otro elemento que podemos introducir en nuestra explotación sería la presencia de los furgones DV conocidos como “negritos” y que eran los encargados de suministrar el vapor para la calefacción en aquellos trenes de viajeros en los que las locomotoras que los arrastraban no estaban preparadas para ello.
Es un elemento que podemos confeccionar a partir de un J300000 debidamente modificado. Aunque el modelo fue construido por Renfe como unificado, en la práctica existieron diversidad de ellos, incluso con grandes diferencias. No obstante compartían una serie de elementos comunes, la caldera de vapor vertical y los depósitos de agua y fuel-oil para dar la calefacción al tren.
Con anterioridad a estos furgones calderines de circunstancias, la Cía del Norte encargó en su día la construcción de 4 de ellos específicamente para estas tareas los cuales fueron asignados a la línea de Barcelona-Ripoll. Eran de color gris a diferencia de los otros que eran verdes.
El modelo que aquí se muestra es la reutilización de un J-300000 de Electrotrén. Realmente las modificaciones a efectuar son pocas y dependen en parte de las ganas que tengamos de detallar el citado furgón. Desde el punto de vista exterior tenemos la incorporación de sendas chimeneas –parece por la documentación consultada que no había un modelo único-, las tomas de fuel-oil, un inyector, y las mangas de freno. Evidentemente pintaremos de color verde el susodicho vagón.
A nivel interior, y según lo detallistas que seamos, podemos incorporar, los depósitos del fuel-oil y agua en forma de U alrededor de uno de los extremos, y una reproducción de una caldera de vapor vertical, la cual también pintaremos. Las puertas pueden estar cerradas, o bien una de ellas abierta con la consabida barra de protección. En resumen, un modelo fácil para adentrarse en este fascinante mundo de las transformaciones. Así dado de alta en nuestro parque nada impide colocarlo tras la locomotora titular, un furgón y a continuación los coches de viajeros que ya podrán iniciar el recorrido.
CONCLUSIÓN
Llega el invierno a nuestra maqueta y su explotación. Ello hará que este material que se supone que durante la época de bonanza no ha circulado, pase por el taller (nosotros) para prepararlo para la dura campaña invernal que se prevé.
Así podremos colocar las cuñas en nuestras locomotoras, hacer composiciones dos a dos, realizar trenes con máquinas aisladas en función de exploradoras, y si llegado el caso las condiciones invernales se agravan, preparar el Zeppelín para que nos despeja la vía de tan bonito, pero indeseado elemento, la nieve.
Dènia l’hivern 2013
Vicent Ferrer
MISCELANEA FERROVIARIA
Se ha recibido orden de que se prepare una locomotora exploradora con el Zeppelin. Las imágenes muestran parte de la maniobra a los efectos de preparar dicha composición.
ALSTHOM CON CUÑA
Al final de su vida activa algunas de estas locomotoras terminaron realizando el trabajo de màquina exploradora. Aqui se muestra una de ellas con su cuña recién montada
TRENES EN LINEA
Podemos ver una sucesión de imágenes ferroviarias en las que aparecen trenes con “Negritos”, el “Zeppelin” en línea y Mikados con cuña